Se acerca el fin de año, y seguramente estarás con mil reuniones de cierre de ejercicio, de revisión de presupuestos, … Por eso no quiero quitarte mucho tiempo con este correo. Pero tampoco quisiera cerrar el año sin compartir contigo algo que me preocupa.
Muchas personas que, como tú, tienen responsabilidad directiva (de áreas operativas, unidades de negocio, de equipos, o de la empresa de forma globa), llevan varios meses en los que, por responsabilidad, tal se hayan sentido obligados a ocultar sus pensamientos, sus temores, sus frustraciones…
La incertidumbre de mercados, ajustes que en muchos casos se han visto obligados a hacer, búsquedas de financiación … todo ello intentando no transmitir la carga emocional, para que no transcienda al equipo o a la familia.
Ya sabes que los seres humanos somos pura química e impulsos eléctricos, y la carga emocional de esos pensamientos que no nos permitimos que fluyan, puede provocar desequilibrios orgánicos que pueden hacernos mucho daño a nivel físico, incluso de forma severa.
¡¡Y yo no quiero que eso te ocurra a ti!.
Por eso, en este vídeo te ofrezco una herramienta que puede ayudarte a que fluyan las emociones que has ido acumulando. No te llevará mucho tiempo, y es una práctica que puede acompañarte y ayudarte en todos los momentos complicados tanto a nivel profesional como personal.
¿Te animas a probarla? Me encantaría que me cuentes cómo lo has vivido.
Si quieres ir un poco más lejos, explorando el por qué y para qué de esas emociones, cómo regularlas, qué hacer con esa energía, cómo contribuir a tus retos desde ahí … puedes contar conmigo para acompañarte a través de procesos de coaching o mentoring.
¿Hablamos?
Suscríbete AQUI a la News ConTalento para no perderte ningún contenido